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Alemania presiona a quienes se resisten a vacunarse

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Angela Merkel, durante la comparecencia de este martes.. / AFP

Acaba con los test gratuitos y los exigirá de los no inmunizados para disfrutar de la vida social

La canciller federal, Angela Merkel, y los primeros ministros de los 16 estados federados han decidido aumentar la presión contra los que se resisten a vacunarse contra el coronavirus en Alemania. Durante una reunión extraordinaria para abordar el estado de la pandemia y las medidas para combatirla, los jefes de los ejecutivos federal y federales anunciaron hoy que a partir del próximo 11 de octubre el estado ya no financiará como hasta ahora los test para detectar el virus de la covid-19 y quienes necesiten hacérselos para participar en la vida social del país tendrán que pagárselos de su bolsillo.

Además y con vistas a la llegada del otoño y el invierno acordaron endurecer las condiciones para visitar locales cerrados como restaurantes, templos religiosos, cines, teatros o eventos deportivos, a los que los vacunados o sanados pueden acceder con solo presentar su certificado. «El ritmo de vacunación ha bajado apreciablemente», dijo Merkel al término de la reunión, para seguidamente subrayar que «pese a los progresos de la campaña se está registrando un aumento del índice de infecciones».

La canciller federal expresó su decepción por el hecho de que solo un 55,1% de los ciudadanos se encuentran actualmente completamente inmunizados, muy lejos del objetivo del 75% pese a que existe un amplio excedente de vacunas. Por ese motivo solo se continuarán financiando desde mediados de octubre los test a aquellas personas que por razones médicas no pueden vacunarse, pero también a las embarazadas, niños y adolescentes.

Ocio en locales cerrados

La jefa del gobierno germano anunció que la presentación de un test negativo será obligatoria en recintos de ocio cerrados en localidades o distritos a partir de una incidencia de solo 35 nuevos infectados en una semana por cada 100.000 habitantes. Tras caer la incidencia a nivel nacional a menos de 5 nuevos casos hace pocas semanas, actualmente se sitúa en Alemania en un 24,4 y el gobierno federal y los ejecutivos regionales temen que en otoño se produzca una nueva oleada de contagios. Merkel subrayó que la incidencia seguirá siendo el factor determinante a la hora de tomar medidas.

«Si la incidencia aumenta de manera dramática entre los veinteañeros, se producirán también ingresos en los hospitales», advirtió, mientras el primer ministro de Baviera, Markus Söder, comentó que «aún no hemos encontrado una fórmula mágica que sustituya ese valor». Por ese motivo y pese a presiones de algunos líderes regionales para añadir otros indicadores como la cuota de vacunación, la cifra de enfermos graves o la saturación del sistema sanitario, los reunidos acordaron que la incidencia de siete días continúe siendo el valor determinante para decidir o aplicar medidas preventivas.

Pese a todo, serán los gobiernos regionales los que, por sus competencias en materia de sanidad, decidan en última instancia como valorar la situación. Angela Merkel destacó que debido a la aparición de la variante delta no puede darse la pandemia por superada. Añadió que sería deseable una cuota de vacunación del 90% para los mayores de 60 años, y del 80% al 85% para las personas a partir de los 12 años, lo que equivaldría a una cuota media para toda la población del país del 70% al 75%.

«El grupo de los no vacunados sigue siendo demasiado grande», dijo a su vez el alcalde-gobernador de la ciudad-estado de Berlín y presidente de la conferencia de primeros ministros regionales, Michael Müller, quien comentó que el gasto en test que más de uno tendrá que hacer a partir del 11 de octubre se lo podría ahorrar si se vacuna gratuitamente. Quien se considere una persona que «ama la libertad» debería reflexionar sobre la vacunación para no ver limitada su vida social, comentó Markus Söder. El primer ministro bávaro prometió que no habrá nuevas restricciones generales severas, pero advirtió que posibles limitaciones afectarán únicamente a quienes rechazan la vacuna y afirmó que «recuperamos la normalidad de nuestras vidas con la vacunación»

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