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Inocultable la brecha entre la ambición y los resultados de López Obrador, siempre tuvo el discurso de ser una figura profundamente transformadora, nunca se imaginó como alguien que vendría a gestionar, señala el analista Carlos Bravo Regidor, luego del informe del Presidente a tres años de haber llegado al cago.
El académico resalta la disonancia ente aquello que proyectaba López Obrador y lo que ha logrado. eE “Así las Cosas” con Gabriela Warkentin y Javier Risco, puntualizó que en el discurso de ayer el Presidente no debió presumir, las remesas o la interpretación de los resultados electorales.
Ante la pandemia, “la respuesta fue tímida y titubeante”, señala Bravo, ya que pudo haber medidas de emergencia como una reforma fiscal un paquete de apoyo fiscal.
Advierte Carlos Bravo que el Presidente nunca tuvo la necesidad de entablar un diálogo con sus adversarios debido a su fuerza en el Congreso; los veía débiles y ahí los mantenía pero ahora afirma “le crecieron los enanos”.
Ahora el Partido Verde ha dado muestras de que no lo va a acompañar y tienen en riesgo el mantener el presupuesto en sus manos, señala Bravo Regidor, de ahí que no puede seguir tratando a los partidos de oposición como lo hacía, ni a sus aliados. Este sería el momento para tirar lacitos, señala.
Respecto a la encuesta presentada por el mandatario, advierte que, a pesar de ser hecha por ellos, ayuda en la medida que la gente quería un cambio, pero qué ha significado ese cambio es lo que se debe cuestionar con los resultados.
En relación a la relación del mandatario con la prensa Bravo Regidor señala que “la prensa se combate con la prensa” y si hay un debate se debe dar entre pares, el Presidente, afirma, no ejerce un derecho de réplica, descalifica. Parece una disputa para saber quién tiene más derecho a utilizar la mentira para defenderse, no aporta a la transparencia, señala.
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